lunes, 14 de septiembre de 2009

Pensamientos sobre la cruz


Si el buen Dios nos envía cruces, nos hartamos, nos quejamos, murmuramos; somos tan enemigos de todo lo que nos contraría, que nos gustaría estar siempre en una caja entre algodones... cuando, en realidad, lo que necesitamos es que nos metan en una caja entre espinas.
La cruz es el camino para ir al cielo. Las enfermedades, las tentaciones, las penas, son manifestaciones de esa cruz que nos lleva al cielo. Pero todo esto pasará rápido. Mirad los santos que ya están allí... el Buen Dios no nos pide el martirio del cuerpo, nos pide el martirio del corazón y de la voluntad.
Nuestro Señor es nuestro modelo. Tomemos nuestra cruz y sigámosle. Hagamos como los soldados de Napoleón. Había que atravesar un puente sobre el que disparaban las metralletas; nadie se atrevía a atravesarlo. Napoleón cogió la bandera y salió primero. Hagamos lo mismo; sigamos a Nuestro Señor, que ha salido el primero... "

San Juan María Vianney