viernes, 1 de febrero de 2013

PENSAMIENTOS SOBRE EL SACERDOCIO. SAN JUAN BOSCO



Celebra la Santa Misa y reza el breviario "pie, attente ac devote". Procura practicarlo tú e insinuarlo a tus  colaboradores (VII, 524).

Es piadosa creencia que el Señor concede infaliblemente aquella gracia que el nuevo sacerdote le pide al celebrar la Primera Misa. Yo pedí ardientemente la eficacia de la palabra para poder hacer el bien a las almas. Me parece que el Señor haya escuchado mi humilde plegaria. (I, 519).

Procura rezar devotamente el Breviario preferiblemente en la Iglesia, a fin de que sirva como de visita al Santísimo  Sacramento. (I, 129).

El sacerdote o muere por el trabajo o muere a causa de sus vicios. (XIII, 86)
Los ministros de Dios deben desentenderse de la política y de los parientes, si quieren hacer mucho bien. (IX, 703).

(A un Párroco). "No mencione el abandonar la parroquia. ¿Hay que trabajar?. Moriré sobre el campo de trabajo. SICUT BONUS MILES CHRISTI QUI ME CONFORTAT. ¿Hay espinas?. Con las espinas cambiadas en rosas los  ángeles tejerán para usted una corona en el cielo". (Salotti, 515).5

La oración es para el sacerdote como el agua para el pez, el aire para el pájaro, y la fuente para el ciervo. (III, 246).

Cuando un sacerdote vive casto y puro, llega a ser dueño de los corazones y es venerado por todos los fieles. (IX,  387).

La fuerza del sacerdote consiste en la paciencia y en el perdón. (IV, 628).

El sacerdote para hacer mucho bien necesita unir a la caridad una fuerte dosis de amabilidad. (III, 49).

Si alguno moralmente no está seguro de poder conservar la castidad, por caridad, no intente hacerse sacerdote ni religioso. (XI, 574).

El sacerdote nunca va solo, ni al cielo ni al infierno. (Lemoyne, 101).

El alma juvenil es su período de formación necesita experimentar la influencia  benéfica, la
dulzura que puede darle la comprensión sacerdotal. (XVI, 169).

No hay nada más penoso para un sacerdote que tener que ver con una conciencia confusa. (XVI, 222).